Los pensamientos son como globos que van llenando nuestra cabeza si les dejamos espacio para que habiten en ella. Pueden llegar a ser una carga que nos abruma, especialmente cuando no les dejamos salir. Se van haciendo cada vez más grandes y pueden llegar a explotar. Es cuando nos sentimos mal, muy mal.
En ocasiones, muchas, rumiamos los pensamientos llegando a un punto en el que confundimos el pensamiento con la realidad.
Los pensamientos no son la realidad
Un pensamiento-globo nos lleva a otro y éste a otro y al final perdemos el horizonte, dejamos de verlo, y los globos nos llevan a una no-realidad. Y actuamos según esa no-realidad que hemos creado. Así, llegamos a comportarnos de una forma distinta a la que lo haríamos si viéramos la realidad tal cual es, sin el filtro del pensamiento-globo.
A menudo creamos situaciones enredándonos en nuestros pensamientos que no son la realidad.
Por ello la importancia de aprender a estar presentes, a dejar pasar esos globos, que se los lleve el viento. Estar presente y no dejarte llevar por el pensamiento te ayuda a responder a las situaciones de una manera más acertada, más acorde a lo que es, sin filtros. Piensa cuántas veces recreas una situación en tu cabeza, interpretando los actos o palabras de otros, y cuando respondes resulta que no era lo que pensabas. El famoso “pensé que” que tantas veces nos ha llevado a equivocarnos.
Te dejo un corto superinteresante sobre cómo nos dejamos llevar por los pensamientos, cómo los enredamos hasta creernos una realidad que no existe, y cómo reaccionamos a esa realidad que solo lo es en nuestra mente.
Coup de foudre (Amor a primera vista)
¿Te ha ocurrido alguna vez?
Y otro video divertido, muy cortito, sobre los pensamientos-globos de nuestra mente
Que los disfrutes!
28 julio, 2018
Me ha encantado el artículo y los vídeos, superdivertido el cortometraje.
30 julio, 2018
Me alegro Antonio. Gracias por pasarte por aquí. Un saludo